Las partículas elementales
Las partículas elementales, de Michel Houellebecq, es un libro que no deja indiferente al lector. El mismo autor, creo, tiene esa fama: o le detestan o le adoran. Por el momento, sólo he leído esta novela, y la sensación ha sido extraña. Lo curioso, en mi caso, es que su lectura me ha servido para criticar a aquellos que le critican y para seguir criticando a aquellos que le alaban. Ya digo, ha sido extraño. Aunque sea una novela dedicada al ser humano y me sienta alejado de lo que cuenta, aunque me sienta homenajeado por hablar con particular ternura de esta especie en extinción que vamos siendo todos. El mundo feliz se acaba.
5 comentarios:
Recomendación, pues, interesante sería Plateforme. Tan destructivo y explicitamente sexual, pero literariamente más interesante.
Tomo nota, pues. Gracias por la recomendación, que ha venido en un momento muy oportuno. Créeme. Un abrazo.
Es un libro tremendo, aunque yo me leí primero Plataforma y quizás por eso, este ya no me impresionó tanto.
En Francia es todo un fenómeno, leí algo sobre él que decía que era una especie de reencarnación de Sade, por lo políticamente incorrecto. Pero a mí lo que me impresiona no es el sexo o el lenguaje o ese racismo burlón que utiliza para llamar la atención, lo que a mí me llega de verdad es esa sensación de que hemos tirado la vida la basura y ya no se puede hacer nada por evitarlo.
Nos vemos.
Perfecta interpretación de lo que leí o entendí al leer Las partículas elementales, aunque hablemos de libros diferentes. Será el siguiente que lea del autor (dos recomendaciones son ya muchas). Un abrazo.
¿Alejado de lo que cuenta?
¿En qué planeta vive usted?
Saludos.
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